jueves, 8 de diciembre de 2011

RAINBOW CAKE


Con las ganas que tenía de hacer este pastel, por fin me surgió la ocasión: una comida organizada por Meri para un grupo de personas bastante importante… Y justo antes de empezar a prepararlo todo se le rompe el horno!! Afortunadamente salió todo redondo, la comida estaba buenísima y lo pasamos súper bien! (un 10 por los mojitos, por la comida y por la compañía!) Yo dije que llevaría los postres, así que la estrella principal del momento dulce iba a ser el Rainbow cake, al fin!! Tras unos problemillas para encontrar los moldes desechables (gracias Angel!), me puse manos a la obra, y la verdad es que tenía tantas recetas apuntadas que al final ya no sabía de quien era la que usé. Pero salió bien, que es lo importante!! Y a pesar de lo aparente que resulta, no tiene complicación, solo un poco de trabajo extra, pero la clave, unos buenos colorantes, moldes de usar y tirar y cuidado máximo si se tiene que transportar (el mio llegó un poco rollo "Torre de Pisa").


Los ingredientes son:

270 grs de harina
30 grs de harina de maíz (maicena)
Una cucharada de Royal
Media de sal
300 ml de buttermilk (yo lo compro en Lidl, está al lado de los yogures)
135 grs de claras (son unas 4-5 claras)
225 grs de azúcar
125 grs de mantequilla
Extracto de vainilla (unas gotas)
Colorante en pasta de los colores deseados (amarillo, naranja, rojo, verde, azul y lila)
Nata para montar (yo use un brick de medio litro y hubiera echado incluso más entre las capas si hubiera tenido)

Vamos a ello:

Primero de todo, engrasar los moldes (de unos 18 cm de diámetro) y encender el horno para que se vaya calentando, a unos 170 grados.

Por un lado, tamizamos  las dos harinas, el Royal y la sal.
Por otro lado batimos el buttermilk, las claras y el extracto de vainilla
En otro bol, batimos la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar unos minutos hasta que la mezcla esté suave. A esta mezcla le echaremos un tercio de los ingredientes secos, luego un tercio de los húmedos, luego otra vez secos, húmedos y terminamos con secos, sin parar de batir a velocidad baja.

Esta masa la pesaremos y la dividiremos en 6. Cada parte de la masa la teñiremos con un color y la hornearemos (a mi me cabían dos moldes en una misma hornada) Id con ojo porque es un bizcocho muy finito y se cuece muy deprisa (a mi me salió 1.100 kg de masa a dividir entre 6)

Dejad enfriar bien los bizcochos. Mientras tanto montad la nata con azúcar al gusto. Una vez todo en orden, colocad el primer bizcocho, remojadlo con un poco de almíbar (yo hice uno sencillo solo con agua y azúcar) y cubrid con nata.  Y así todo el rato, hasta que sea la última capa y ya será cuestión de cubrir los laterales con más o menos gracia… La verdad es que es espectacular, y los nervios al abrirlo… Guau!!!!

3 comentarios:

  1. Que bueno! el corte se ve estupendo. Yo tengo pendiente de hacerlo también.
    Besos

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  2. Te ha quedado maravillosa!! yo la e hecho un par de veces y siempre sorprende!! besos

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